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Michael Bennet ha declarado: «Los agricultores y ganaderos estadounidenses quieren la oportunidad de competir y vender sus productos en todo el mundo, incluso en el mercado cubano».

En uno de los momentos más tensos de las relaciones entreEstados Unidos y Cuba, y en medio de la profundización de una crisisalimentaria en Cuba, dos senadores estadounidenses han propuesto presentar anteel Congreso un proyecto de ley que descarte los límites para la concesión decréditos privados destinados a las exportaciones agrícolas desde Estados Unidoshacia Cuba.

La denominada Ley de Expansión deExportaciones Agrícolas de 2019, ha sido presentada por lossenadores John Boozman, de Arkansas, y Michael Bennet, de Colorado, con el finde eliminar un significativo impedimento para que los agricultores y ganaderosde Estados Unidos tengan mayor acceso al mercado cubano.

Michael Bennet ha declarado: «Los agricultores yganaderos estadounidenses quieren la oportunidad de competir y vender susproductos en todo el mundo, incluso en el mercado cubano».

La Ley Agrícola de 2018 de Estados Unidos, contenía unartículo destinado al empleo de fondos de los programas de promoción deexportaciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos en el mercadocubano.

No obstante, informes del Consejo Económico y ComercialCuba-Estados Unidos, mostró que ninguna de las 87 solicitudes del 2019 paraacceder a los $201 millones del Departamento de Agricultura, se relaciona con elfomento de exportaciones hacia el mercado cubano.

John Boozman ha hecho énfasis en que Cuba importa el 80por ciento de sus alimentos, y los empresarios estadounidenses se hallan endesventaja al no contar con el financiamiento privado.

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A lo que agregó Boozman: «Nuestro proyecto de ley eliminaesta barrera, lo que permite a nuestros productores agrícolas competir y, almismo tiempo, expone a los cubanos a los ideales, valores y productosestadounidenses. Es un pequeño paso, pero que puede generar grandes dividendospara los agricultores estadounidenses y el pueblo cubano».

Esta propuesta de ley llega en un momento en el que se haevidenciado un alza en las compras cubanas de productos alimenticios en EstadosUnidos, dentro del marco de una profunda crisis de escasez de alimentos yracionalización de alimentos y productos en Cuba.

En el primer trimestre de 2019 las ventas de alimentos decompañías de Estados Unidos a Cuba se incrementaron en un 30 por ciento, conrelación a la misma etapa del pasado 2018. La cifra invertida en las compras dealimentos asciende a $90 millones de dólares y el producto más importado porCuba es el pollo congelado.

El gobierno de Cuba emplea cada año $2,000 millones dedólares en los alimentos de la canasta básica y las provisiones del turismo. Sinembargo, el escaso flujo de efectivo ha dificultado las operaciones comercialescon Estados Unidos, el cual, por su cercanía, debía ser el principal mercado dealimentos de Cuba.

A lo que ambos senadores han comentado: «Como resultado,los productos agrícolas estadounidenses se han vuelto menos competitivos y Cubaha recurrido a otros países que pueden otorgar crédito directamente a loscompradores cubanos para realizar transacciones».

La mayor cifra de compras de Cuba en Estados Unidos tuvolugar en 2008, con un monto de $70 millones de dólares. Debido al bloqueo deEstados Unidos, Cuba está obligada a pagar los productos en efectivo, y el paíscarece del mismo.

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